Igual que encontrar un buen médico o dentista, conseguir un agente de seguros eficaz puede repercutir en su calidad de vida. Piense en esto: Su agente de seguros de confianza lo ayudará a conseguir una cobertura de seguro que le permita protegerse en caso de un accidente de auto y a proteger su patrimonio en caso de demandas por responsabilidad civil.
No necesita un agente de seguros o un bróker para obtener la cobertura. Puede iniciar el proceso de contratación de un seguro básico para su auto o casa comunicándose directamente con una compañía de seguros, a menudo por Internet.
Un buen agente de seguros es:
Las directrices de otros sectores de servicios también se aplican en este caso:
Hay tantas especialidades de agentes como tipos de seguros. Algunos se centran en el hogar, el automóvil o una combinación de productos. Lo fundamental es encontrar un agente que represente sus necesidades actuales y futuras. Por ejemplo, es probable que un joven de 18 años no esté tan interesado en un plan de seguro de vida, del mismo modo que un trabajador que no tiene auto puede no interesarse en el seguro de auto. Un buen agente lo redirigirá a alguien que se ajuste mejor a sus necesidades.
Algunos agentes solo tienen licencia para ofrecer seguros de una compañía. Estos agentes se llaman “agentes cautivos”. Los agentes cautivos pueden conseguir buenas ofertas de una marca concreta y conocer los pormenores de sus especialidades. Por otro lado, es posible que desconozcan o no puedan compartir otras oportunidades de seguros con usted debido a su contrato de exclusividad.
Otros agentes son independientes, lo que significa que pueden ofrecer pólizas de varias compañías de seguros diferentes. Si no está seguro de qué compañía quiere, un agente de seguros independiente puede ayudarlo a comparar tarifas y coberturas de varias aseguradoras.
Algunos agentes cobran cargos por sus servicios, además de la comisión que reciben de la compañía de seguros. Cuando compare los cargos de los agentes, debe sopesar si el costo vale la pena. Pregunte con antelación a los agentes si cobran cargos y, si lo hacen, cuánto es el cargo.
Si se encuentra en una situación complicada, lo último que quiere es un agente que responda con lentitud. Averigüe el tiempo que suelen tardar en responder a sus clientes.
Una búsqueda en Internet con el nombre del agente o la agencia y el estado lo ayudará a descubrir cualquier queja presentada contra ellos. Todos los agentes deben tener una licencia vigente.
Otra señal de advertencia es que un agente demasiado ansioso le diga que puede cubrir todas sus necesidades de seguro antes de escuchar cuáles son sus necesidades. Un buen agente primero lo escuchará y luego le dirá lo que puede y lo que no puede hacer. De nuevo, si no puede ayudarlo, le recomendará a otro que sí pueda.
Si no tiene una necesidad urgente de seguro, no tenga miedo de comparar precios. Un buen agente no se resistirá a tener una reunión exploratoria, compartir su perspectiva y estará abierto a que usted hable con otros agentes antes de comprometerse.
Hay varios sitios para empezar. Las referencias personales son la mejor manera de encontrar un buen agente. También puede pedir recomendaciones a otras personas de confianza de la industria de servicios. Por ejemplo, si va a comprar una casa, pida al agente inmobiliario que lo representa que le recomiende algunos agentes de seguros de casa.
Si no está seguro de por dónde empezar a buscar un agente de seguros, no dude en acudir a una fuente de confianza, como un vecino o haga una búsqueda en Internet.
Kemper trabaja con algunos de los mejores agentes de seguros locales e independientes del sector. Para los seguros de casa y automóvil, use nuestra herramienta en línea para encontrar un agente cerca de usted.
Para el seguro de vida, vea los centros de Kemper Life.
Este material es solo para dar información general. Los productos, servicios y descuentos que se mencionan en este documento no están disponibles en todos los estados ni en todas las compañías aseguradoras. Todas las declaraciones están sujetas a los términos, exclusiones y condiciones de la póliza correspondiente. En todos los casos prevalece el lenguaje actual del contrato de la póliza.